Se ha dicho muchas veces que la música es medicina del alma. CURAITIVO es un proyecto que nació de experiencias sanadoras hace siete años, y que ahora presenta su segundo álbum con un mensaje de retorno a la naturaleza.
Al frente de CURAITIVO se encuentra Alejandro Gómez Garzón, recordado por haber integrado el grupo de rock progresivo Ardila Lunch (al lado de Juan Carlos Padilla y Diego Aguilera) a comienzos del siglo XXI. Con Ardila Lunch llegaron a ser teloneros de Luis Alberto Spinetta en 2004 y grabaron un disco exitoso llamado “Dos”, antes de seguir cada uno por su camino.
Alejandro está ahora radicado en Salento, Quindío, rodeado del verde de las montañas cafeteras. Esa nueva experiencia, sumada a la investigación sobre músicas autóctonas y sanadoras, dio paso a “BLANCO”, el nuevo álbum de CURAITIVO. Son nueve canciones, compuestas y grabadas en su casa de campo (donde maneja su propio estudio de grabación, Curitas Música) con un espíritu contemplativo. “Me propuse abordar temas universales con un lenguaje sencillo: el lenguaje de la naturaleza”, cuenta Alejandro.
¿Por qué BLANCO? “El blanco representa la energía no contaminada”, explica el músico. “Pero además un blanco es un objetivo, y en este caso mi objetivo es la reconciliación con la tierra, desde mi perspectiva de hombre blanco”.
Además participan varios músicos invitados, que en tiempos de pandemia grabaron en sus respectivas casas y enviaron el material para la mezcla en Curitas Música. Entre otros, van apareciendo a lo largo del disco: Urián Sarmiento en percusión, Teto Ocampo en tiple y La Muchacha en coros. Además suman sus voces, en un par de temas, los cantantes Andrés Correa y Victoria Sur.
Este nuevo álbum de CURAITIVO puede ser también un viaje sonoro por nuestro continente. El folclor suramericano atraviesa estas canciones y escuchamos géneros como la cueca, la zamba o el bambuco que, para Alejandro Gómez, “son un mismo ritmo pero con diferentes acentos”.
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